quarta-feira, novembro 26, 2014

Lujo y excesos y las calles de Dubái



Un león en el jardín, un coche cubierto de metales preciosos o máquinas de oro para llevar unas pepitas encima, por lo que pueda pasar. La vida de los habitantes de Dubái no es como la del resto de los mortales, no reparan en gastos y su riqueza está al mismo nivel de su ostentosidad. Si no lo creen, véanlo ustedes mismos (ElConfidencial)