sábado, agosto 23, 2014

Las mejores piscinas urbanas: cuando nadar es lo de menos

Si eres carne de ciudad, si llevas la gran urbe en las venas y no hay quien te despegue de grandes avenidas, descomunales plazas, benditos cafés y nutridas programaciones de ocio y cultura, agradecerás el viaje pasado por agua de estas piscinas de hotel. Son urbanas a rabiar y están a pie de azotea. Por supuesto, llamándote a gritos. Aunque con semejantes vistas, tal vez te olvides de lo mucho que te gustaba nadar. Algunos caprichos tienen nombre de hotel. Y solo hay que cruzar el umbral y no digamos ya subir al último piso para darse cuenta del placer. Es el caso del Berkeley de Londres, en el barrio de Knightbridge, que ofrece placeres a gogó: la comida en el restaurante del célebre chef inglés Marcus Wareing y el baño en la piscina que corona su azotea.  Los ojos se te irán hacia el propio Knightbridge y Hyde Park. Por supuesto, hay néctar y ambrosía: queríamos decir zumos, fruta fresca y batidos que te sabrán a eso, a bebida de los dioses. Dónde: Wilton Pl, Knightbridge (fonte: El Confidencial)