sábado, maio 25, 2013

Cataluña cifra en 16.500 millones de euros su déficit fiscal



Li aqui que "la Generalitat hace público su cálculo de balanza fiscal con el Estado en pleno debate sobre el techo de gasto. En pleno debate sobre el límite de défict para las Comunidades Autónomas, la Generalitat ha hecho público su cálculo sobre las balanzas fiscales entre Cataluña y el Estado correspondientes a 2010, o lo que es lo mismo, el cálcudo del saldo resultante entre lo que se aporta a la caja común y lo que se recibe en forma de transferencias e inversiones. Así, y según el gobierno catalán, la balanza arroja un déficit que mantiene la tendencia de los últimos años, y que en 2010 se situó entre el 5,8 y el 8,5% del Producto Interior Bruto (PIB) catalán, lo que equivale a entre 11.258 y 16.543 millones. Una cifra u otra se obtienen según el cálculo utilizado. En este caso, la Generalitat prefiere destacar la que se conoce como de "flujo monetario", que arroja un saldo negativo más amplio, mientras que soslaya la que se obtiene a partir de la "carga-beneficio", menos favorable, aunque ambas igualmente refuerzan el argumento del agravio. Lo que no ofrece la Generalitat son las cifras sin neutralizar, es decir, las tablas incluyendo el endeudamiento en que incurre el Estado en tiempos de crisis. En este caso, las cifras prácticamente desmontan los argumentos de la Generalitat: en 2009, por ejemplo, adoptando el cálculo de "carga beneficio", y con cifras sin neutralizar, el cálculo fue positivo a favor de Cataluña. Según las cifras facilitadas esta tarde por la Generalitat, Cataluña aportó en 2010 el 19,4% del total de los ingresos de la Administración central, pero recibió el 14,2% del gasto total del Estado. Según el gobierno catalán, entre 1986 y 2010, el déficit medio anual se sitúa en el 8,1%.  La rueda de prensa, y las cifras aportadas, no pueden leerse de otra forma como la voluntad de poner presión al Gobierno en un momento precisamente en el que, con la oposición de varias comunidades autónomas, el Ejecutivo está considerando establecer un techo de gasto distinto, o "asimétrico", permitiendo un déficit mayor para los territorios con peores cifras, como es el caso de Cataluña, Valencia y el resto de regiones mediterráneas".